Roma ciudad abierta, de 1945 abre el telón de la Trilogía de la Guerra, siendo la primera película rigurosamente neorrealista.
Todo lo que estaba prohibido hasta ese momento está puesto en pantalla: la visibilidad de la clase trabajadora, los conflictos sociales y políticos, la pobreza y lo nefasto de la guerra.
Con lo mínimo e indispensable, con dinero prestado y en parte obtenido con la venta de algunos muebles, con el boceto de un guión en colaboración con Federico Fellini, Alberto Consiglio y Sergio Amidei, escrito al calor de los hechos, Rossellini ...
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