El destacado profesional, Coordinador del Programa Social de Fundación Terram, descubre las serias carencias de la autodenominada, economía más moderna de América de Sur. El déficit educacional -en especial desde la óptica de las oportunidades que brindan, se diría, los dos sistemas educativos paralelos chilenos- trazan un cuadro cuando menos preocupante.
¿Podrá un país dejar atrás, en forma definitiva, el subdesarrollo y elevar la calidad de vida de su población si desde la enseñanza de las primeras letras se conforma una situación que discrimina y segrega a un estamento social?