Fuego de artillería, aviones de combate derribados, zonas residenciales bombardeadas y decenas de muertos.
Azerbaiyán y Armenia han vuelto a hacerlo. Están al borde de la guerra, inmersos en los mayores enfrentamientos militares en décadas por la disputada región de Nagorno Karabaj.
El primer ministro armenio, Nikol Pashinián, ha dicho que la última situación es mucho más grave que los enfrentamientos anteriores.