¿Es el ejército un nido de fascistas? ¿Se alecciona a miles del jóvenes cada año en el culto al generalísimo? ¿Campan a sus anchas los radicales dentro de esta institución? Si mi propia experiencia sirve de algo, intento responder a todas estas cuestiones y ya de paso continuo analizando cómo se radicalizan las mentes.