Para la mayoría de atletas de élite el deporte es una pasión que les acompaña desde la infancia. Pero para los deportistas transgénero, es aún más que eso: es un escudo que les protege de la incomprensión, y también lo que les permite recabar ese respeto que echan en falta cuando de su identidad sexual se trata. Pero su participación en competiciones está abierta a debate, y no todos se pronuncian en su favor, por ejemplo: ¿tiene ventaja una mujer trans al participar en categorías femeninas?