La bodas hindú se caracteriza por su gran riqueza ceremonial. Simbolismo, música y belleza para una celebración de tres días de duración, en los que se llevarán a cabo rituales y bendiciones, necesarios para preparar a los novios ante el inminente matrimonio.
La boda hindú comienza con la fiesta del Sangeet, en la que las mujeres de las dos familias se reúnen para embellecer y preparar a la futura esposa para recibir al novio en casa de su familia. Es aquí donde se lleva a cabo el Mehndi, destinado a embellecer a la novia, decorando sus extremidades con pinturas de henna. Como curiosidad, dentro de estas pinturas se escribe el nombre del novio, el cual deberá encontrarlo, como una forma de atraer la buena suerte sobre su matrimonio.