En otomí, lengua originaria de México, Soona significa luna. "Para mí la luna tiene un poder femenino muy grande. La mayoría de mis artesanas son mujeres" explica Marcela Regalado mientras muestra los artículos "hechos a mano y con mucho amor" que vende en su pequeña tienda en la capital alemana. El colorido de Soona Otomi no pasa desapercibido en el barrio. Con una gran sonrisa, la emprendedora mexicana cuenta que hay quienes se detienen para decirle "gracias por traer tanto color a esta calle". Ella, a su vez, se siente feliz de saber que sus clientes aprecian los esfuerzos que hace para viajar y estar en contacto con los artesanos que confeccionan cada uno de los artículos que vende en Berlín. De esta manera Marcela Regalado conoce de primera mano a sus creadores. Del contacto personal nace su compromiso de brindarles apoyo si enfrentan dificultades, como cuando ayudó a una de las artesanas a reconstruir la vivienda que había perdido en el terremoto que sacudió México en 2017.
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