China tiene más de 1.400 millones de habitantes, se define hoy como un estado socialista de dictadura democrática popular. El 75% de su producción energética proviene del carbón, sin embargo, China es uno de los principales productores de energías renovables. Desde 2015, China ha ratificado los acuerdos de la COP 21 y parece que va a iniciar una revolución verde. ¿Es una simple declaración? ¿Hasta dónde puede llegar el gobierno? No es eso lo que nos interesa: preferimos ir a las personas o a sus empresas, que ahora mismo están tratando de mejorar su calidad de vida sin dañar la naturaleza, y quizás, dándole una oportunidad de supervivencia.