La arena no es un recurso infinito y lo estamos agotando a una velocidad vertiginosa. En los últimos 30 años la demanda ha aumentado un 360%. Las cifras asustan. Una cuarta parte de las costas del mundo se están erosionando. Se podría pensar que es un recurso inacabable, pero solo una pequeña porción de la arena del planeta es explotable, y sus depósitos se agotan. Menos arena significa más erosión de las costas, y eso supone el deterioro de las infraestructuras que están cerca de ellas. ¿Cómo proteger entonces este valioso recurso? Desde el hemisferio norte hasta el sur, con la ayuda de geólogos, ingenieros y defensores de la naturaleza, comprenderemos por qué la arena es el ingrediente esencial de nuestra vida.
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