Hoy hablamos del mito de Circe, la bruja o hechicera más temible y poderosa. ¿Fue una villana como cuentan algunos relatos o más bien una heroína salvadora? ¿Transformaba a los hombres en cerdos por su odio hacia el género masculino?
La mitológica hechicera Circe representa el encantamiento, la brujería y el peligro que las mujeres con conocimientos suponían para los hombres. Su poder viene de la naturaleza y de su origen divino, ya que es una diosa.
Es una bella hechicera de gran poder, capaz de alterar la realidad y de transformar en animales a sus enemigos. En la Odisea, Circe transforma a la tripulación de Odiseo, pero el héroe, que tiene el poder del intelecto, consigue evitar el hechizo.
A partir de ese momento, el respeto es mutuo y Circe jura que no le hará daño y devuelve a sus hombres a su forma humana. Circe no solo devuelve a la tripulación su humanidad, sino que restaura al héroe y le ayuda en su camino.
Sin embargo, la literatura latina transforma a Circe en arquetipo de la pasión, la lujuria y la maldad. Su copa es tentación, su vara, dominación, y sus conocimientos, maldad. Y más adelante, por supuesto, será una femme fatale.