Décadas de conflictos armados en Colombia han marcado a la población rural e indígena de Colombia. Desplazamientos, violencia y recientemente, la pandemia del coronavirus son factores que afectan la salud mental,de las comunidades indígenas. Las terapeutas populares reciben una formación para fungir como orientadoras emocionales en sus comunidades y en la lengua original. Las terapeutas populares crean un espacio seguro y de confianza en el que las muejeres indígenas, más bien reservadas, se abren al poder curativo de la palabra.