En Myanmar, el norte del estado de Rakhine es una zona cerrada del mundo. En las últimas semanas, la violencia que ha tenido lugar ha empujado a cientos de miles de Rohingya a huir a Bangladesh. Nuestro corresponsal en la región, Clovis Casali, fue uno de los pocos periodistas capaces de ir allí. Se encontró con miembros de esta minoría musulmana, aterrorizados. Un documento exclusivo.