El 29 de noviembre de 1984, un grupo de amigos, cineastas y familiares, se reunieron en Santiago a recordar a los cineastas Jorge Müller y Carmen Bueno, tras cumplirse diez años de su detención y desaparición a manos de la DINA. Ese mismo día, la Asociación Gremial de Profesionales y Técnicos Audiovisuales (APTA) declara el 29 de noviembre el Día del Cine Chileno, en memoria de ambos. La muerte y desaparición de Carmen y Jorge no es sólo otra muestra del terrorismo de Estado en tiempos de Pinochet, sino que representan asimismo la pérdida de ese bullente mundo artístico-cultural, que puso su talento al servicio del pueblo, reunidos junto a él, luchando, “cuerpo a cuerpo contra las telarañas del malvado”, como dijera en verso Pablo Neruda.
El padecimiento sufrido por aquellos jóvenes luminosos, es reflejo de la muerte de aquel Chile de los anhelos y de los sueños, del Chile social y de movilización popular, de un Chile que ya no existe y del que somo testigos de oídas, de un país que desapareció junto a ellos. Pero su legado, como una semilla creciendo en lo yermo, germina en nuestros días. Jorge y su cámara al hombro transmitiendo en el presente. La mirada en llamas de Carmen observándonos desde la pantalla. Un grito que recorre el tiempo, retumbando eternamente.
Publicada por: Memoria Porfiá el 30 noviembre 2022