En medio del ajetreo del tráfico de Sri Lanka, se abre paso el popular tuctuc. Los conductores de estos vehículos de tres ruedas siempre fueron hombres. Ahora, sin embargo, las primeras conductoras conquistan las calles.
A Anulawathi, Thushari y Jega las une su profesión: son conductoras de tuctuc en Sri Lanka, un sector dominado tradicionalmente por los hombres. El tuctuc de tres ruedas es uno de los medios de transporte más populares, pero para estas tres mujeres es ante todo su medio de vida. Las tres fueron abandonadas por sus maridos y tuvieron que buscar la manera de sobrevivir y dar de comer a sus hijos. Se atrevieron así a un pisar un terreno reservado a los hombres. Y es que son ellos a quienes la sociedad acepta como sostén de la familia. Por ello, las mujeres son consideradas competencia indigna por sus colegas masculinos y percibidas como rivales. Y, sin embargo, las conductoras son especialmente populares entre las clientas.
Thushari vive en la capital, Colombo. Es madre soltera y se gana el sustento para ella y sus dos hijas. Anuwalathie trabaja en Kandy, estuvo unos años en el extranjero y, con lo que ahorró, se compró un tuctuc. Jega también es madre soltera. Vive con su hijo y su sobrina en la ciudad turística de Hikkaduwa. Las tres mujeres han entrado en el negocio de los tuctucs con el objetivo de ser independientes y libres.