Si quiere experimentar la riqueza de Sudamérica como paraíso natural en un espacio reducido, viaje a Costa Rica. La mitad del país está cubierta de selva tropical. Desde monos capuchinos a guacamayos y tapires, aquí están representadas numerosas especies animales, incluidos extraños lagartos de tiempos prehistóricos. E incluso bajo el agua, el pequeño estado centroamericano fascina por su abundante naturaleza. La película presenta iguanas, monos capuchinos de hombros blancos, loros como el guacamayo soldado, periquitos veruga, el tapir y muchas otras criaturas insólitas. Pero el espectador también se adentra en los maravillosos procesos del mundo vegetal. Por ejemplo, el equipo de rodaje muestra cómo las epífitas suben al cielo a costa de su planta huésped sin echar raíces en el suelo. Por supuesto, también hay una mirada a la cultura indígena de la selva tropical. Sin embargo, el punto culminante del viaje a uno de los últimos paraísos de Sudamérica es una excursión de buceo con tiburones frente a la isla del Coco, en el Pacífico. Los tiburones martillo, en particular, ponen la piel de gallina no sólo a los submarinistas, sino también a los espectadores.