Este episodio desarrolla la pugna de Isabel la Católica y de Juana la Beltraneja por el trono de Castilla. Un choque trascendental, con extraordinaria influencia sobre Castilla y sobre España. Isabel no tenía opciones al trono. Tercera en la línea sucesoria de Juan II, tenía por delante a sus hermanos, el rey Enrique IV, y el infante Alfonso. Cuando Enrique tuvo una hija, Juana, ésta se convirtió en la heredera del trono. Fue necesario que intervinieran los intereses nobiliarios para que Alfonso e Isabel se convirtieran en aspirantes a la corona y la muerte de aquél para que la infanta llegara a la primera línea. Y siguieron siendo los intereses nobiliarios y las políticas matrimoniales de la época los que sentaron a Isabel en el trono, onvirtiéndola en la gran reina de la unificación, del final de la Reconquista, de la empresa americana, de la expansión por Europa… curiosa situación la de quien se dice católica y practica el enfrentamiento con su familia, con su sobrina porque hoy dia parece demostrado que Juana era la hija del rey, sobrina de Isabel y por tanto heredera legítima de la Corona de Castilla.