El régimen de Israel recrudece su agresión contra El Líbano. La cifra de muertos supera los 550 en los recientes bombardeos aéreos israelíes.
Hay al menos 1 835 personas heridas en los ataques lanzados desde los territorios ocupados hacia El Líbano, que se calculan en unos 1600. Según el ministro de Salud libanés, la gran mayoría de los muertos, eran personas no armadas.
Las autoridades de El Líbano, han condenado las recientes agresiones israelíes, y han pedido a las Naciones Unidas, al Consejo de Seguridad y a los países influyentes, que se pongan del lado de la justicia y detengan las agresiones israelíes.
El Líbano también condenó los ataques contra civiles e infraestructura de las ciudades por parte del régimen sionista.
Mientras el régimen de Tel Aviv ha amenazado con realizar ataques más amplios y precisos contra el país árabe, los residentes del sur del Líbano han recibido amenazas telefónicas de parte de Israel, ordenándoles alejarse inmediatamente de la zona en la que viven.
El jefe de derechos humanos de la ONU pidió evitar una mayor escalada de hostilidades entre Israel y Hezbolá, expresando su alarma por los ataques de Tel Aviv y el presidente de Irán, Masud Pezeshkian, durante una reunión con el secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, en Nueva York ha condenado las agresiones de Israel contra El Líbano. Dice que el régimen de Tel Aviv busca expandir la guerra en toda la región de Asia Occidental.
Por su parte, Hezbolá, informó haber lanzado ataques de represalia contra las posiciones militares del régimen sionista en Kiryat Shemona y las bases militares de Israel cerca de Haifa.
En esta edición de Detrás de la Razón analizamos los llamados a un alto al fuego entre Hezbolá y el régimen de Israel y la reacciones de países como Irán, que denuncian que el régimen de Tel Aviv busca expandir la guerra en toda la región de Asia Occidental.
Por Osvaldo Canales
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