Cuando llegué a Catar estuve impactado: su infraestructura de veras es mucho mejor que la de Dubái. En el centro de la ciudad se pueden encontrar huertas, el metro es autopilotado, hay islas artificiales. En las calles casi nunca hay gente. Aunque los proyectos arquitectónicos se parecen a los europeos, en realidad en Doha y sus alrededores sí que se cumplen las tradiciones árabes.
¿Cómo se siente vivir en Catar? Hablé con un periodista, extranjeros para saber más de eso. ¿Quieren ver más? ¡Acompáñenme en este viaje!