En 1879, un niño de 16 años deja atrás la granja de su padre por la ciudad de Detroit. En la época en que los únicos medios de transporte eran trenes o carruajes de caballo y los primeros automóviles eran vistos como máquinas de carrera para los ricos, este niño abriría su propia empresa de carro y cambiaria por completo la industria del automóvil a lo que hoy en día conocemos. 35 años más tarde, después de su llegada a Detroit, la mitad de todos los autos en la Tierra llevarian su nombre y ese niño, Henry Ford, se convertiría en unos de los hombres más ricos en la historia de Estados Unidos. Esta es su historia.