Tras presentarse a una audición a distancia por la pandemia, Valentina Kuchen entró a la Escuela Estatal de Ballet de Berlín. Está en camino a ser una gran bailarina y nos cuenta cómo le hace.
Tenía 14 años cuando se presentó a una audición en la Escuela de Ballet de Berlín. Pero debido a la pandemia, le cancelaron su vuelo, así que Valentina Kuchen tuvo que hacerlo de otra forma.
Ella es de Argentina y quería estudiar en Berlín, así que la escuela adoptó las audiciones en línea y vía videoconferencia le hicieron exámanes físicos y de técnica. ¡Y los aprobó! A los 15 años se mudó a Berlín y ahora es la única argentina en la Escuela Estatal de Ballet.
"Con la danza puedo expresar todo lo que siento", dice en entrevista con Pía Castro, y anima a todo el mundo a bailar pues no hace falta ser una primera bailarina para experimentar la danza, además de que la danza clásica no es el único camino.
Pero Valentina está fascinada con su escuela. Entrena 6 horas al día y además de técnicas, tiene clases de teoría, de teatro, de matemáticas, y por si fuera poco estando ahí ha aprendido otros idiomas, como inglés, alemán e italiano.
Para ella y para muchos bailarines, la danza en Berlín es un ejemplo a seguir porque además de enseñar la danza clásica, también mezcla con contemporánea.