El infierno de Verdún es hoy símbolo de las batallas humanas y materiales a nivel industrial y de las atrocidades, el sinsentido y la deshumanización de la primera guerra mundial. En lo que fue el campo de batalla, hoy hay 40 cementerios militares franceses y 30 alemanes. Allí están enterradas 170.000 víctimas mortales de una de las batallas más sangrientas de la primera guerra mundial.
El 21 de febrero de 1916, el 5º cuerpo del ejército alemán comenzó el ataque contra las posiciones francesas. Al final del año, lo habían hecho retroceder hacia su posición inicial. La lucha de diez meses por la fortaleza francesa de Fort Douaumont fue una de las batallas más sangrientas de la primera guerra mundial.
Sin el apoyo de sus aliados, Francia y Alemania se encontraron frente a frente en Verdún en una mortífera guerra de trincheras y pagaron un alto precio: más de 300.000 soldados perdieron la vida en los campos de batalla de Verdún. Hoy en día, esta batalla parece absurda. Se cobró casi la misma cantidad de vidas en ambos lados, sin obtener resultados viables desde el punto de vista militar. Pero para los soldados alemanes y franceses de aquel momento no se trataba de una batalla sin sentido. ¿Por qué estaban dispuestos a luchar?
El documental se pregunta acerca de los motivos políticos de ambos bandos y describe la vida cotidiana de los soldados en plena guerra. ¿Por qué luchaban los alemanes y los franceses en aquel momento? ¿Por nacionalismo? ¿Por la rutina bélica? ¿O hubo otras razones? Imágenes de archivo brindan un panorama de esta confrontación titánica. Las escenas recreadas son a color para diferenciarlas de los documentos de la época. Numerosas animaciones por computadora ilustran la historia de los eventos y la topografía del campo de batalla.