El tamaño de los objetos espaciales es increíble. A veces cuesta creer que puntos de luz, apenas perceptibles esparcidos por el cielo nocturno, puedan ser bolas gigantes de plasma caliente capaces de consumir sistemas planetarios enteros. Algunos de ellos se encuentran a cientos y miles de años luz de la Tierra, mientras que otros se encuentran muy cerca, de acuerdo a los estándares cósmicos. Y hoy nos trasladaremos a las más destacadas de estas luminarias.