Mirando hacia atrás, toda vida presenta algún punto de inflexión. La cesura llega, generalmente, de forma inesperada, irrumpe en las vidas. El reportaje presenta a personas de Europa del Este que hablan de sus rupturas personales en la vida.
El trotamundos y artista Yonko Dimitrov trabaja para producciones de Hollywood y Broadway. Este búlgaro de 34 años viaja alrededor del mundo y se describe a sí mismo como un nómada. Su país de origen está estancado en algún punto entre el poscomunismo y los objetivos democráticos. Su padre vive en el pueblo de Dolna Malina. Los habitantes del lugar quieren que Yonko sea su alcalde. Después de algunos meses quiere dejarlo y huir. Pero los habitantes no le siguen el juego.
Julia Panic descubrió su amor por la música a una edad temprana, pero inicialmente dirigió su vida en otro sentido: tuvo éxito como periodista y analista política en Moldavia. Pero un golpe del destino la obliga a preguntarse qué es lo realmente importante. La respuesta lo cambia todo.
Roman Janiszek era un orgulloso minero en la mina polaca de Wałbrzych, símbolo de trabajo duro y reconocimiento social. Pero, tras la disolución del bloque soviético, la mina se cierra. Roman se ve ante las ruinas de su vida. Entonces llega su punto más bajo: se rompe la relación con su hija.
A veces divertidos, a veces tristes, pero siempre emotivos, auténticos, hablándonos al mismo nivel, estos tres protagonistas comparten sus vidas. Viven en una región marcada por rupturas, tradiciones y cambios.