Alemania está inmersa en una crisis. Pero a los ricos no les afecta. El reportaje echa una mirada al mundo hermético y elitista de los millonarios y multimillonarios. ¿Qué opinan los ricos de sí mismos y de sus privilegios?
El documental acompaña al director general de una conocida marca de relojes de lujo en la costa atlántica francesa. El directivo critica a Alemania por regular en exceso a sus empresarios y opina que se debe recompensar a quienes asumen riesgos. Un acaudalado contratista de obras de Düsseldorf explica que no todos los millonarios son grandes triunfadores, ya que la mayoría se hicieron ricos por herencia. Pide a los políticos que aumenten drásticamente los impuestos a los ricos para destinar el dinero a resolver los problemas acuciantes del país. Por ejemplo, en infraestructura o educación.
Nos introducimos en la vida cotidiana de los alumnos en el internado elitista de Salem. Gente adinerada invierte decenas de miles de euros al año para que sus hijos puedan asistir a esta escuela. Aquí deben aprender la importancia de la responsabilidad para poder dirigir más tarde las empresas familiares. Al fin y al cabo, cientos de miles de empresas en Alemania pasan actualmente a manos de la siguiente generación.
Los superricos viven más tiempo y disfrutan de privilegios fiscales. Desde 1996, el Estado alemán ha perdido 380.000 millones de euros por la suspensión del impuesto sobre el patrimonio. ¿Cumplirán los multimillonarios con su responsabilidad en tiempos de crisis?