De acuerdo con cifras de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), al menos 200 millones de mujeres en el mundo ha sufrido algún corte en sus genitales, una práctica considerada crueldad infantil para muchas sociedades, pero que es tradición en una serie de países. En esta edición de Reporteros, conoceremos el relato de jóvenes europeas, de padres africanos, que fueron sometidas a esta práctica, que les dejó secuelas y cicatrices tanto en el cuerpo como en el alma.