El 11 de marzo de 2011, la central nuclear de Fukushima Daiichi fue víctima de la más desgarradora furia de la naturaleza. Japón sufrió el terremoto más intenso de su historia. La tierra rugió y los mares enviaron una devastación en forma de tsunami que arrasó la costa noreste del país.
En la planta de Fukushima, presa de la ira de un terremoto que hizo caer la red eléctrica nacional y un tsunami que destruyó los generadores diésel de emergencia, se desencadenó el segundo accidente nuclear más grave de la historia.
Operada por la empresa Tokyo ...
continua